martes, 6 de agosto de 2013

ON HOLIDAY


ACTUALIZACIÓN DE DATOS

Creo que la última vez que  me asomé al portal fue con motivo de un fin de semana infernal por las tierras del Bages en pleno territorio Maqui. Dos jornadas de auténtica btt bajo un sol abrasador fueron suficientes para dejarme el organismo en modo alarma.

Y es que unos días más tarde aprovechando una salida en bici de carretera precisamente a Castelltallat, las fuerzas fueron más bien pocas. Cogía la bici con ganas pero las piernas se acordaban que unos días antes habían sucumbido a los bandoleros anarquistas de la Catalunya interior. Durante estos días del mes de junio, se iban sucediendo sesiones de las que a mi me gustan. Simplemente haciendo alguna Volta María llegando a Roca del Corb, o rodeando los caminos de Can Bogunyà y el Llac Petit entreteniéndome entre trialeras y senderos aptos tanto para la btt como para el running de montaña.

Alternando también con el pádel pasando rondas en el torneo social del CTLF haciendo pareja con Dani Belasteguin, testeé un cinco mil por el recorrido paralelo a la riera que en perfil favorable me llevó a un 3,42’’ de media que sumados a la partida me dejaron bien servido para ir dando forma  a la que es la mejor de mis estaciones en cuanto a sucesión de entrenos.

Para ese domingo 30 de junio yo mismo fui quien se cabó su propia tumba. Cité a Albert y Ramon para acercarnos a ver murciélagos. Las rampas de más del 20% del Ratpenat fueron las culpables de dejarme al borde del mareo mientras tiraba de compact. Menudo esfuerzo estando vacío de fuerzas. Lo atribuyo aún a la no recuperación tras los calores del verano y la encadenacion de sesiones. Menos mal que en el añadido a Castellbisbal aún pude mantener el ritmo so pena de dejarme las muelas en el ritmo impuesto por un pletórico a Albert y un abuelo casado con el diablo como Ramon con piernas como pistones.

Metidos ya en el mes de julio, poníamos un punto y seguido a las tardes en el CTLF iniciando un romance con mi agua con gas de distintos sabores como bebida del verano. De igual modo nos plantábamos en la final del torneo de padel.  Mientrastanto la btt seguía siendo la aliada perfecta para pasear por los bosques dels Caus. Unas veces por unos cortafuegos y otras veces por otros accediendo por riera de Gaià y Font de la Teula hacia Can Cardús. El reto era subir a 0 las empinadas cuestas aunque fuera a costa de perder la virilidad con el sillín amenazando por la espalda.

Lo mejor fueron las dos o tres sesiones que organizamos con Rafa pensando ya en TR’14. Ya recuperado del accidente que le dejó con un recuerdo en su clavícula y superado el trance, nos fuimos a rodar por el Janot y el Farell para dibujar una primera tarde perfecta de hora y cuarto adviertiendo que Fanfi sigue estando ahí fuerte como una roca. A esa sesión le sucedieron sendas subidas una en nocturnidad por Camí dels Monjos y de la Senyora por la Canal de la Cova de les Ànimes y la Font del Saüc. Perfecto recorrido coronado en hora y cuarto para bajar por Plecs del Llibre y Avenc de Can Torres bañándonos en la Font de la Tartana para parar el crono en otra hora y pico.

El domingo 11 se programó una Subida al Corb junto a Ladero, Albert,tiet y  Rafa. Para esta ocasión decidimos llegar por Portaferrissa y Foradades para subir por sendero hasta la Roca del primo del Trencacalòs. Para la bajada optamos por Alts de la Pepa y Torrota de l’ Obac con sus magníficas vistas de la Montse. Por pista nos desviamos hacia la Diagonal y el Farell para acabar en el diminuto lago a la hora prevista.

2013 PALAMÓS ITU TRIATHLON WORLD CUP by BDream

Brutal. El fin de semana de 17 y 18 de Julio, Palamós se erigió en la capital mundial del Triathlon y nosotros estuvimos allí para verlo y contarlo. El sábado en modo participante en el Age Group federado para el triatlón de distancia olímpica y el domingo en calidad de voluntario para el evento.

Aprovechando que pasábamos unos días de vacaciones en St Antoni de Calonge a escasos tres kilómetros de boxes, el escenario y el hecho de poder estar con la familia convertía este Triatlón en perfecta ocasión para reencontrarme con las tres disciplinas desde ell pasado Banyoles ’12. Efectivamente, casi un año sin probar el agua que no fuera bebida. Tan sólo un par de largos a la boya para no presentarme a cámara de llamadas sin algún metro recorrido. Pues eso, aparcadas todas las dudas y descargándome de cualquier tipo de presión, me lanzaba a las nueve y media de la mañana después de animar a Ladero a sumarse a la fiesta, y me dirigía hacia la primera anaranjada con igual tranquilidad que ritmo constante. A medida que pasaban los metros me iba encontrando mejor. Nadando en recto sin desviaciones inoportunas y por mi carril libre de todos golpes, obstáculos e incomodidades. A poco de finalizar  la primera vuelta, advierto que el zoot va abierto a modo cantaor flamenco. Ya decía yo que me frenaba. Subo cremallera del trisuit y salgo a la arena con más estilo que garbo mientras de reojo veo que aún chapotean. Elena y las niñas me animan y yo les devuelvo una sonrisa mientras me voy a por mis 750 adicionales. Sigo con buen ritmo. Con respiración acompasada. Alternando el lado izquierdo con el derecho mientras sigo junto a algún que otro nadador. Eso es buena señal. Pronto me acerco al espigón y la lata inflable gigante ya está mucho más cerca. Toco el fondo con la mano y eso es señal de levantarse y salir del agua. Nada de mareo. Troto con mi elegancia para dirigirme a boxes. Sin perder tiempo excesivo me pongo las mavic, el casco, la cinta con el dorsal y me enfundo las radar. Sin darme cuenta estoy pasando por la que será de zona pro de boxes. Una estupenda alfombra azul que identifica claramente al tri frente a la roja de las estrellas de Holywood. Habrá quje dar varias vueltas. Pongo el cateye a 0 y enfilo la primera vuelta en dirección a la Fosca. A la altura de Port Marina una graciosa cuesta me pone en mi sitio. Hay que cambiar el plato grande por el pequeño y subir algún que otro piñon. Menos mal que no se alarga mucho. El circuito se hace divertido. Se callejea mientras está todo cortado al tráfico y alguna que otra curva se toma con riesgo. Bajo ya por la marina y me dirijo al puerto para volver a tomar la avenida. El domigo por ahí mismo pasarán aunque a un ritmo “ligeramente” superior. Cuento las vueltas. Nos mezclamos los de la sprint con otras categorías. Yo voy por encima de mis 30 de media. Al final acabo en 32. Ahora toca calzarse raudo las Ds Trainer de cordon elástico que acabaran haciéndome herida por no cordar en el siguiente orificio. Ahora toca enfrentarse a calor y pasearse por el Promenade en dirección a St Antoni por donde ya he pasado algún que otro centenar de veces. Empiezo a hacerme un lío con las vueltas. Llevo mi garmin inseparable pero donde creo que son 5 vueltas resultan ser 7. Acudo en cada vuelta al botellín. Las niñas me ponen sus palmas. La visera me protege. Las molestias en los empeines son más bien divertidas. Ya estoy en el último giro. Al final algo más de 2h y media para volverme a sentir atraído por el triplete. El acceso a meta y el color azul me hacen revivir Niza, aquella prueba que siempre guardaré en el recuerdo como la mejor de mis actuaciones. Y esta en Palamós ocupa igualmente un lugar destacado ya. Igual que Banyoles. Pruebas míticas y talismán de las que acordarse en cada temporada.

Lo mejor sin duda se guardaba para la jornada del domingo. A primera hora corrian las chicas y a las 12 a pleno sol los elite men. Copa del Mundo deTriatlón. Yo con mi pase en zona de tribuna tras participar como voluntario. La tarde anterior con la elite nacional me tocó estar en el circuito de bici departiendo con un juez maño encantador. Para el domingo me tocaba acompañar al ganador a control antidoping lo que me permitiría disfrutar de unos minutos entre bambalinas una vez hubieran acabado la prueba. Vivimos ambas pruebas desde la tribuna, justo en zona de boxes. Emocionante desorden en cada transición. A cada vuelta íbamos haciendo las apuestas mientras los grupos de bici se unían y en el tramo a pie se distanciaban.
La emoción se departió al final de la prueba masculina. Un Buckingham especialista de 3000 obstáculos y metido en triatlón tan solo hace tres o cuatro años, imponía su leu ante un ruso, Polyanski y un ucraniano. En los últimos metros se batían en un emocionante sprint que se dirimió en favor del inglés. Y yo viéndolo allí en directo. Justo en zona de meta por donde iban desfilando fibrados triatletas exhaustos y abrasados por el intenso calor de esas horas del mediodía en la Costa Brava. Bolsas de hielo, agua pulverizada, isotónicos .... y tras entregarle el acta del control antidopaje, yo pegado al ganador para dirigirlo tras la entrega de premios al pabellón donde le esperaría el doctor.

Magnífica experiencia tanto la del sábado como la del domingo. Nuevamente seducido por el universo triatleta y disfrutando de un perfecto fin de semana triatlético.