VOLTA A COLLSEROLA Y SINCOTRON ALBA

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Las últimas instrucciones tras la cena de Qk's del viernes era que si no amanecía lloviendo se saldría con ruedas finas. Putxi tenía el recorrido pensado y al final lo acompañamos Josep y yo sin nada que decir.

Tras la duatlón del sábado y la fatiga advertida por la noche la mañana prometía. Ya de arrancada subiendo por les Martines veía que iba a tocar quedarse en posición de bronze, conseguir chapa y a verlas venir.

Bajada a Castellbisbal y enlace por na NII hasta San Andreu de la Barca con unas nubes amenazando. Baix Llobregat gris para empezar a subir hasta Corbera de Llobregat en medio de la sierra. Palma de Cervelló y bajada hasta Molins, muebles salvados no sin esfuerzo detrás de la Roubaix y la Fondriest. Subida en contínuo por carretera inédita hasta la Creu d'Olorda y buen desayuno con bocadillo de atún confirmando que donde manda patrón no manda marinero. Transición hasta el Tibidabo socorriendo a dos ciclistas con llantas de perfil pero sin cámaras de válvula larga. Obra de caridad y ascenso hasta Vallvidrera y Tibidabo. Bajada por Arrabassada hasta el lateral de la Ronda de Dalt y subida por el Velódromo para acceder en ciclocross a la carretera del Forat del Vent. Entonces cuando Putxi decide bajar piñones es cuando testeo sensaciones. Igualo desarrollos y aguanto el ritmo constante deseando coronar. Desisto a falta de un par de curvas y doy por finalizado el suplicio. Vacío bajamos a buscar al Capitá y disfrutamos en la bajada hasta Cerdanyola. A relevos por el sincotrón del Parc Tecnològic y a la llegada de Sant Cugat me separo de la compañía y continuo en solitario la aventura para acabar en Barcelona. Antes hay que subir por Arrebassada hasta Tibidabo. Vuelvo a Vallvidrera y aparezco en Via Augusta. Llego antes del horario previsto y alargo hasta Montjuich para ver a los del Maccabi y Panathinaikos en el Sant Jordi y corono hasta el Castell para tomarme unas patatas en el patio de armas tomando el sol rodeado de guiris mientras dibujo la última semana antes de mi segundo ironman con unos últimos 108kms y 1730md+ en las piernas peludas.

Pues en estas estoy, a cinco días de enfrentarme nuevamente a la distancia múltiple. Momento para gestionar las dudas, calmar los nervios y cargar las baterías. Descanso, algo de ejercicio y últimos retoques para estar al cien por cien en la Ampolla. Para el sábado anuncian nubes y claros pero de momento no aparecen lluvias. Esperemos que la climatología sea la aliada perfecta y en su caso facilite la consecución de un nuevo objetivo.

Queda repasar recorridos, preparar material, cambio de cables y fundas, ajustes de cambios, cadena, ruedas ... y todo listo. Barritas, isotónicos, geles ... chip, garmin ... perillona zamorana, toda la logística en general para disfrutar de un buen fin de semana de triatlón doméstico federativo alejado de grandes marcas y spónsors. Esperemos que los cerca de 200 triatletas hagan válido lo del pot petit y la bona confitura.

Felicitar desde aquí a Rafa con su grandísimo Remences y a David por su trabajada Intermon Oxfam TrailWalker. Y a todos los que se consiguen aquello que se proponen y viven intensamente cada momento que el deporte les brinda.